domingo, 31 de octubre de 2021

Expectativa Vs Realidad del Teatro Guiñol Cubano (Podcast+Crónica)


Teatro Guiñol Cubano

Estaríamos cayendo en el clásico bucle de aquella imagen que no entendíamos y nos resultaba familiar por lo que representaba, de la serpiente que se engulle a si misma, llamada Uróboros. Por lo que sí, seguimos avanzando en el tema de las personalidades de esta manifestación. También hablamos de las expectativas  y la realidad que enfrenta el Guiñol Cubano. Si se han dado cuenta, en cada artículo hay un momento en el que hablamos del declive que sufrió esta expresión del arte en la década de los años 70 del siglo pasado.

Tampoco es que tengamos mucho que contar sobre sucesos o puestas en escena que marcaran de manera relevante la historia del Guiñol, más allá de la era de los Camejo, Pepe Carril, Ulises García, Amigos y sus Amiguitos y Pelusín del Monte. Porque si hay algo en común en todas las obras que he tenido el placer de ver son esos escenarios cutres; con luces muy malas y mal acomodadas; muñecos grotescos con acabados que dejan mucho que desear y que dan más miedo que ganas de seguir apreciándolos; actuaciones que en muchas ocasiones se alejan de las buenas presentaciones que podemos ver en el teatro dramático, y manejadores que dan la apariencia de perderse en el espectáculo.

De esa manera, se provoca un desligue total entre la obra, el actor y el público, consecuencia que se traduce en que mi generación, y me atrevo a decir que al menos dos anteriores, no conozcamos la calidad del buen Teatro Guiñol que se producía en Cuba en los 60. Todas las compañías tenían una calidad similar a las famosas 5 estrellas Michelín, hoy no podemos aspirar ni una buena recomendación en Tripadvisor. Lo peor es que hay que aceptarlo como una realidad establecida, y hay que luchar lo que se necesario para recuperar la calidad en esta manifestación artística. Tampoco podemos dejar de mencionar el trabajo de actores como: Armando Morales, Xiomara Palacios

Osvaldo Doimeadiós y Rubén Darío Zalazar; los grupos de teatro matanceros como Trompoloco y Teatro de las Estaciones o el Guiñol de Oriente; también se ha apelado a revivir personajes que en el pasado fueron muy aceptados  y con toda esa artillería tampoco se ha podido despertar al gigante dormido del guiñol.

Esa antigua técnica de apelar a la nostalgia no creo que ha esta altura sirva de mucho, hay que ir a la base del problema que han sido y son las malas políticas culturales que reprimen el espíritu creativo inherente a los artistas, guionistas y directores artísticos que se dedican a esta rama y han sido los más afectados por esa mano enemiga que al parecer no entiende de fino arte y de creación desde la libertad de creación artística.

 Ese espíritu libre que caracteriza a la cultura y que te hace no poder vivir sin ella. Espíritu que lleva por el camino inevitable que radica en la reflexión necesaria sobre cómo el guiñol cubano refleja la crisis cultural y social que se vive en la Cuba moderna y que se viene arrastrando desde hace muchos años. Crisis que ha retrasado y casi disipado toda la idea de esa fuerte creación artística que encarna el arte cubano, y que se suscita en la vida cultural de la isla sin importar si produces dentro o fuera de ella.

Así ha sido la historia del guiñol, marcado por una fracturación evolutiva, donde pocas veces somos participes de nuevas y originales innovaciones artísticas que vayan a embellecer y mejorar la factura física e interpretativa de esta manifestación. Como público queremos ser testigos de una escenificación acorde a lo que esperamos: que no aburra, que esté bien actuada y que toda la escenografía baile al ritmo del buen producto que anhelamos consumir. 

Ya es hora de dejar atrás esas producciones que pertenecen a un tiempo primario; aunque con esto no digo que se dejen de hacer, sino que hay que avanzar y tomar todo lo que ellos nos legaron y engrandecerlo. Viene siendo el momento de asumir con madurez que existen serios problemas y hay que resolverlos con premura; la cultura y el arte en general lo piden a gritos.

Mis expectativas no son otras que ver el esperado renacer de las marionetas y muñecones tan necesario en un mundo como el de hoy, falto de magia y amor. También hay que decir que no todo es culpa de las instituciones y grupos de teatro, las personas y la audiencia en general no nos damos la oportunidad de sorprendernos asistiendo a una pieza teatral. Y romper con el mito de que el teatro de títeres solo incluye obras para los niños. Como bien dice su nombre, es Teatro Guiñol, su función es la misma que el teatro dramático, sólo que su singularidad es que utiliza títeres en las caracterizaciones de ciertos personajes, porque también hay actores reales en todas las obras que interpretan personajes de todas las edades y géneros,

Mi consejo es que los espectadores no deben subestimar nunca al Guiñol y al arte. Son canales de conexión entre el yo consciente y el aquello que despierta las más profundas emociones y el bienestar mental. El Guiñol puede ser ese vehículo que como humanos necesitamos para salir de nuestra realidad, sólo escoja lo que quiere ver y no se limite, entregue su yo al escenario y al actor, y verá como la experiencia teatral se convierte en magia.

jueves, 28 de octubre de 2021

Carlos Pérez Peña, el hombre teatro ( + Fotos)


  Si hay algo interesante dentro del mundo de las tablas cubanas es la carrera de Carlos Pérez Peña, un hombre que tuvo la posibilidad de formar filas en varias compañías de teatro incluyendo el Guiñol en la era Camejo-Carril, hasta estar codo a codo con Vicente Revuelta. Su historia comienza por allá por los años 60 del pasado siglo cuando Modesto Centeno los introduce a él, a Ulises García y Alonso Lastres al recién fundado Teatro Guiñol. La particularidad de Carlos con respecto a sus otros noveles actores, fue que solo duró lo mismo que su preparación académica, por lo que su tiempo bajo este formato fue bastante corto, y no por eso, menos interesante y formador.

De ahí en adelante todo fue historia llena de crecimiento y superación, que debería servir de ejemplo a las nuevas generaciones de actores cubanos. Al concluir su estadía entre los títeres y la imaginación, zarpó su barco hacia el teatro tradicional. Su profesor Mario Rodríguez Alemán, que también en esa época representaba en el Teatro Dramático Nacional y el Conjunto Dramático Nacional, le insistió para que audicionara para el grupo en donde estuvo hasta que éste se disolvió.

Carlos Pérez Peña en la década de los 60

El Grupo de Teatro La Rueda (TR), fundado por el argentino Néstor Raimondi y dirigido por Nelson Dorr, le abrió las puertas, y así se vio inmerso en un grupo lleno de grandes estrellas que participaban en la Televisión, Teatro, Radio y Cine cubano. Estrellas como José Antonio Rodríguez, Carlos Ruiz de la Tejera y Luis Alberto García; por supuesto que habrá muchos otros artistas noveles que al igual que éstos, hoy son grandes figuras de la cultura cubana. La singularidad de este grupo radicaba en el montaje de grandes espectáculos, sobre todo dramas o tragedias como las de Shakespeare, Cervantes y  Homero. Aunque aquí su participación  tampoco duró mucho tiempo, le sirvió como una tercera escuela después de compartir escena con los Pepe, Carucha, Ulises García y el Conjunto Dramático; pero aún le faltaba aprehensión actoral antes de realizar su acto final.


Carlos Ruiz de la Tejera compañeros de escena en el TR

Y como todo hombre que vive a través de representaciones, esa no fue su última compañía teatral, faltaba todavía su estancia en la obra "Las Doce", dirigida por uno de los genios del teatro moderno cubano: Vicente Revuelta. Carlos, en diferentes oportunidades confesó que esta compañía le ayudó a sedimentar ideas y conceptos que representan al teatro en su totalidad, y sin dudas, así fue. En vídeos que podemos conseguir de esa etapa de Carlos Pérez Peña se refleja su crecimiento actoral, se percibe soberbio y sobrio. La manera de "hacer" de Vicente con el entrenamiento del actor desde la perspectiva de que éste es un ente psico-físico-expresivo, traspasa la barrera de limitarse a interpretar un rol en una determinada escena.

Vicente Revuelta

La madurez que adquirió en cada colectivo teatral le ayudó con el método interpretativo de la que se volviera su puerto definitivo, y ese sería el "Teatro Escambray", alcanzando aquí su consagración en el temprano año de 1968 y que hasta el día de hoy aún permanece. La singularidad de este conjunto es que su base operativa se encuentra en el macizo montañoso del mismo nombre. Llevando el fino arte del teatro a lugares que jamás soñarían con una obra artística de ningún orden, sino se radica en la capital del país o los centros de las provincias. 

Cártel del Grupo de Teatro Escambray

Sin embargo, el legado más importante del Teatro Escambray es su manera primitiva de "hacer", su vívido realismo, característico de sus actuaciones, sin duda es admirable, fogoso, espléndido y exquisito; la concreción de las actuaciones impacta a cualquier espectador. Siempre surge la pregunta: ¿Cómo lo hacen? Actuaciones que siempre están a la caza insaciable de provocar y contradecir, siempre bajo la estela de lo controversial e incómodo, dirigido a los criterios más conservadores. Imposible tener esas características y no representar a la sociedad cubana.

Con todo esta frondosidad actoral de Carlos Pérez Peña es inconcebible no hacer un artículo sobre él en este momento, pese a que su permanencia en el Teatro Guiñol fuera tan corta. Su historia forma parte de la impronta de este pionero colectivo. Sirva también de un pequeño homenaje de parte de alguien que admira el arte de los grandes monstruos de las tablas cubanas.

sábado, 23 de octubre de 2021

9 Curiosidades del Teatro Nacional del Guiñol Cubano (+Podcast)

Con la creación del Teatro Guiñol se formaba una nueva era en donde los mejores del país se unían en una unidad artística y creaban la magia intrínseca que despierta el Guiñol, y por muchos años así fue. Tristemente el Teatro Guiñol de Cuba, de ser un retablo frondoso y lleno de vida, pasó a ser guardián de muchos secretos que son necesarios desvelar para que resurja el hermoso arte que algún monstruo intentó hundir y que hasta el día de hoy no ha podido volver a levantarse con la fuerza de aquellos años dorados. Por eso, hacernos eco y conocer todos los datos, actores y curiosidades relacionadas debería ser una inquietud de todos los cubanos y de todos los que aman la isla y su cultura. Sin más, comencemos:

  1. Al triunfar la Revolución Cubana en 1959 se comienzan a nacionalizar salas de cine como la que es actualmente sede del Guiñol Nacional, en los bajos del edificio Focsa, aunque esta locación no fue la única; en 1960 se inauguró la sala "Francisco Covarrubias" en el Teatro Nacional de Cuba. Otro cine que se convirtió en teatro fue el bautizado "Mella" en 1961, La sala "Hubert de Blanck" comenzó a ofrecer funciones de guiñol en 1964 y la última que abrió las puertas para obras de teatro de títeres fue la sala teatro "El Sótano" en 1968, todos ellos en los primeros 10 años de la Revolución. 
  2. "Changó de Ima" fue una obra creada y dirigida por Pepe Carril para el guiñol. Esta puesta en escena marcó la vida artística del actor Ulises García, quien expresó que "(…) le exigió desdoblarse de una manera inimaginable (…)". 
  3. La obra "La Corte Del Rey" estuvo sin estar en cartelera por más de 30 años hasta que Pepe Camejo la volvió a estrenar en la década de los 60.
  4. En la obra mencionada antes la invitada especial fue la actriz Candita, quién participó en su estreno en los años 30.
  5. La obra "La Corte del Rey"  dirigida por Pepe Camejo fue un gran éxito y se enfrentó a duras críticas por parte de la comunidad católica de la isla causando casi su censura.
  6. Existió un mote que funcionaba como una especie de "título nobiliario" dentro del mundo cultural de aquella época para nombrar a familias consagradas dentro del arte cubano. Este mote era "Feudo"  y solamente 3 familias lo ostentaban: Los Alonso en la Danza, Los Revuelta en el Teatro y Los Camejo en el Teatro Guiñol.
  7. La obra "Cecilia Valdés" adaptada al Teatro Guiñol por la consentida Carucha Camejo jamás se estrenó por los problemas que hubo en el año 1971 entre los funcionarios decisores gubernamentales y el arte, a pesar de que ya tenían repartidos los personajes y haber realizado múltiples ensayos.
  8. La persona que introdujo a Ulises García, Carlos Pérez Peña y Alonso Lastres al Guiñol en el tiempo de los Camejo y Carril, fue Modesto Centeno.
  9. Quien estrenó la obra "Cecilia Valdés" después de la  puesta en práctica del proceso de "Parametración" fue Modesto Centeno y según el actor Ulises García no fue una buena obra, ni tuvo éxito entre el público, ni de la crítica especializada.

Yo soy de las que aún guarda la esperanza que el Teatro Guiñol de Cuba vuelva a ocupar ese espacio que por muchos años perteneció a las tablas cubanas en el panorama internacional. El teatro de títeres es un arte necesario en estos tiempos como un regreso a las esencias, y todos estos años han sido testigo de ello. Es necesario un lugar donde se pueda ver el legado de los Camejo y Carril; y los nuevos titiriteros ponen sin duda alguna todo su empeño en mejorar su técnica y llevar a todos los rincones del país esas marionetas movidas por los hilos del corazón.

viernes, 22 de octubre de 2021

Ulises García, el soñador del Teatro Guiñol Cubano (Fotos + Vídeos + Podcast)


Foto: Ulises García y Alelé_ Cuba encuentro

Ay Ulises, cuánto extrañamos verte títere en mano e interpretar junto a Alelé, ese muñeco de guante que deleitó a varias generaciones de cubanos. Desafortunado mi momento, mi época  que se perdió esas obras que pertenecen hoy a una parte de la gran historia del arte cubano y que se ha extraviado en las alas del tiempo. Muchos no saben tu nombre, otros no conocen tu legado, de lo que sí estoy segura es de que andas revoloteando por el Teatro Guiñol como buen ángel de la guarda cuidando que el espíritu titiritezco nunca muera.

Ulises García fue de los pocos titiriteros que tuvo la suerte de poder estar ahí junto a los hermanos Camejo (Pepe y Carucha) y Pepe Carril; fue su discípulo o aprendiz. Caminó entre grandes puestas en escena como: La Celestina, El Pirulero de Ernesto Lecuona, Comino y Pimienta vencen al diablo, Mefistoféles, El cartero del Rey, Changó de Ima, Cecilia Valdés, El Maleficio de la Mariposa, y otros tantos.

                                                                                                      Ulises García y Rubén Darío Salazar

El encuentro con el arte de los hermanos Camejo y Carril, según sus propias palabras, fue (…) de lo mejor que le pudo ocurrir (…), sin embargo, la decisión de Pepe Camejo de llamarlo a trabajar con el guiñol de manera definitiva terminó en desacuerdos con el director Alfonso Arau. García conoció a los tres primeros por medio de su profesor Modesto Centeno, quien se encargó de establecer los nexos entre él y el grupo de los Camejo y Carril para trabajar con ellos en el Guiñol Nacional. Lo más gracioso de todo eso es que Ulises comentó en diversas ocasiones que jamás estuvo interesado en trabajar o experimentar con los títeres. A veces este tipo de casualidades lleva a caminos insospechados y grandiosos.

Según el propio Ulises García en entrevista otorgada a Rubén Darío Salazar, recuerda cuando Pepe Camejo le dijo "(…) te vas conmigo para Santiago de Cuba (…)". En ese momento Camejo iba a estrenar la obra "Comino y Pimienta vencen al diablo"; siendo el estreno en las tablas de Ulises y su primera gira con el Guiñol, y ese hecho le despertó el amor por este arte escénico. Confieso que si hubiera sido mi caso, al igual que Ulises, me hubiera enamorado; imposible no hacerlo cuando estás rodeado de personas apasionadas por algo tan bello y edificador.

El grupo de los Camejo y Carril no fue con las únicas personas con quienes colaboró, estudió o trabajó. Su lista de colaboradores es bastante extensa e incluye a Raquel y Vicente Revuelta; y a Kike Capablanca, que a pesar de ser esa la primera incursión en el Teatro Bufo de Kike, éste lo invitó a colaborar en la obra "Mefistófeles" de Ignacio Sarachaga. En la entrevista antes mencionada Ulises habla sobre los titulares de los periódicos al otro día del debut en el que decían "(…) Ulises García triunfa en la obra (…)", relata también que a partir de ese momento su mundo en el arte se comenzó a abrir y lo llamaban para formar parte de casting importantes.

Sin embargo, su amor por los títeres triunfó, sobre todo lo demás, aunque cabalgó por muchas ramas del teatro de manera exitosa. Ulises es de esos actores que no te cuestionas su talento, incluso te planteas que es innecesario hacerlo, sería un gasto inútil de neuronas. Dejó testimonio de su talento en cada obra que participó y en los llamados que le hicieron, confesando él mismo, que lo hacía de manera disciplinada. Tristemente, de ese tipo de actores nos quedan muy pocos.

Y entonces... un programa comenzó a posicionarse dentro de la cartelera infantil en el año 1967 y era más ni menos que "Amigo y sus amiguitos"  que pasaba a través de la Televisión Cubana, estaba dedicado al público infantil y en cada episodio narraba una historia diferente. Historia que era contada por títeres; de ahí nació Alelé, un personaje neuronal dentro de la trama de cada historia. Muchos recuerdan estar pendientes de la hora en que pasaba cada episodio y verlo en esos cachivaches "Caribe" en blanco y negro, y a pesar de la baja calidad de la transmisión propia de la época, la magia que transmitía el programa no tenía comparación.

 

Vídeo de Amigo y sus Amiguitos

Participaba un casting consagrado y estelar, como la actriz Consuelo Vidal que daba vida a Amigo. No había ninguna duda de que ese programa no podía fracasar; era imposible y punto. Sacaba una sonrisa a la persona más amargada, yo solo he podido disfrutar el programa a través de YouTube y me imagino verlo en vivo como si estuviera viendo su estreno en esas pantallas sin color. Mi imaginación siempre ha sido mi fiel aliada, lo imagino como un programa que limpiaba las angustias y las penas y visualizo una reunión entre niños curiosos e imaginativos.

¡Qué derroche de talento en las actuaciones! Desde mi posición, unos adultos haciendo reír a niños e imitándolos, es llevar la actuación al plano de la genialidad. Las apariciones de Alelé en el programa como el niño gracioso y perspicaz (al menos, así lo percibo yo) y de esa misma manera quiero recordar a Ulises García. Su partida a España por medio de un contrato laboral cortó definitivamente su carrera dentro del retablo y murió en esa misma ciudad recordando aquellos momentos memorables de la época dorada de la cultura cubana. Les recomiendo que lo recuerden con esa sonrisa amplia y pícara, es la clave para nunca olvidar su legado, yo solo puedo decir: gracias por hacerme disfrutar tanto de tu despliegue actoral.

El Centro Nacional de las Artes Escénicas así lo despidió por medio de un extenso obituario:

(…) "Al marcharse Ulises por los caminos de la eternidad, nos deja una nostalgia incurable, pero también la certeza de haber compartido con su persona y su arte un tiempo único, que pertenece por derecho propio a los bronces de la cultura nacional (…)"


Pepe Carril y su Teatro Mítico, o arte del olvido (Podcast + Fotos)

 

Pepe Carril fue un exponente de la cultura cubana para quien, ni el ostracismo que vivió Virgilio Piñera, ni el trastoque otorgado por psicólogos sin título a Dulce María Loynaz, ni el destierro literario de Lezama Lima se pueden comparar con su situación. Pepe Carril fue la tercera pata de la mesa de la fundación del Teatro Nacional del Guiñol. El Carril de Pepe fue muy distinto, ni los libros se acuerdan de esas funciones majestuosas que realizó junto a los hermanos Camejos por ese siglo XX, que se tragó, al estilo del Triángulo de las Bermudas, a muchos cubanos de los que ni las huellas esparcidas que hubieran podido dejar, podemos seguir.

Murió junto a los títeres de Carucha y Pepe Camejo, y nunca más se supo de él. Pobre de nosotros que no tenemos el derecho de rememorarlo. Su delito lo dictó la "Parametración"; sí, eso mismo, muchos de los nacidos en Cuba hemos olvidado esa palabra, unos por conveniencia, otros porque no quieren revivir esa etapa, y otros porque no han tenido la oportunidad de indagar los capítulos más oscuros de la historia de la isla. Pepe y la parametración van de la mano, pues la padeció de la manera más cruel e injusta que se pueda imaginar.

Hay que ofrecer el contexto para que se pueda entender: la parametración formó parte de un tiempo bastante oscuro, y aún antes de que ésta se aplicara, ocurrieron algunos percances. El comienzo de todo fue en el mes de Junio del año 71 del pasado siglo. Yo lo bauticé como el inicio de un período de guerra entre el gobierno cubano, los artistas, y por supuesto, el arte; como había mencionado en otro escrito. Este proceso, que más bien fue una cacería de brujas, se convirtió en una pesadilla en la que intelectuales y artistas experimentaron ostracismo, dolor, separación, censura, descalificaciones, humillaciones, y hasta cárcel por motivos ideológicos que nada tenían que ver con la cultura.

Tomando como referencia la famosa reunión entre intelectuales y funcionarios encabezada por Fidel Castro Ruz, conocida como "Palabras a los intelectuales", en donde muchos artistas e intelectuales hicieron uso de la palabra, y la que tuvo más relevancia fue la de Virgilio Piñera, cuando a petición de todos los intelectuales expresó la inseguridad que sentían muchos por el posicionamiento de la Revolución con respecto a ellos, a lo que Fidel respondió con las famosas palabras: "Dentro de la revolución, todo; contra la revolución, nada" .

Pepe Carril

A partir de ahí un camino se comenzó a marcar, y desde la revista Verde Olivo se publicó el 11 de abril de 1965 el libro El socialismo en Cuba, escrito por Ernesto Guevara de la Serna, más conocido por "Che", donde éste afirma que "el pecado original" de los intelectuales fue no haber luchado u oponerse a Fulgencio Batista. 

Eso fue la punta del iceberg que destruyó al Titanic cultural cubano, y en el Primer Congreso de Educación y Cultura llevado a cabo entre los días del 23 y 30 de abril de 1971 todo se balanceó, se definió y se desencadenó una cacería de brujas que se expresó en cierres de proyectos culturales, la no edición o publicación de libros, películas que no se realizaron o se cancelaron en medio de su producción, se tildó de "decadente" a casi toda la música del momento e incluso obras clásicas, obras danzarías que no se realizaron más y tanto el teatro tradicional como el de títeres sufrieron muchas transformaciones que, más allá de favorecerlos, les restó vida. Ese Congreso llevó al camino de la radicalización ideológica dentro de la cultura con respecto a los creadores dentro de la isla y con los cultores radicados en el exterior.

Dirán ahora ¿por qué explico todo esto? y -¿Qué tiene que ver con Pepe Carril?- pues todo está conectado. Carril fue uno de los más afectados por estas medidas, al igual que sus compañeros de escena. Fue encarcelado junto a Pepe Camejo y luego tuvo que marcharse del país a vivir en un exilio doloroso y mortal. Y que no tengamos casi ningún dato de su vida y obra es la consecuencia de una series de decisiones gubernamentales mal tomadas.

Es ahí cuando te preguntas: -¿Cómo un hombre de su talla desapareció casi sin dejar rastro?- sólo por medio de aquellos que lo conocieron, por los libros que escribió y que están a la venta en muchas páginas en el ciberespacio, o por medio de los osados grupos de teatro que han re-estrenado sus espectáculos, tales como Teatro Mítico, donde se recogen todas sus obras de teatro, Changó de Ima entre otras, que deberían ser declaradas Patrimonio de la Cultura Nacional y son obras altamente recomendadas.

 
                                        Foto: Cuban Theater Digital Archive_ctda.library.miami.edu                                                   

Las respuestas a esas preguntas de los párrafos anteriores están respondidas a lo largo de este artículo. Es una gran pena que tengamos que escribir estás líneas casi a ciegas, ya que de este teatrólogo y actor hay muy poco que encontrar desde el momento que la cultura cubana fue -medida por cuestión de varones con respecto a las plumas- como se refería Samuel Feijóo a este período. No vean mal mi comparación, en nuestra isla sucedió así, y tristemente aún sucede, es cuestión de malas costumbres arraigadas, porque todo esta sujeto al sistema y su política que en su mayoría es machista.

Pepe Carril hoy es casi un fantasma y un cuasi olvidado, no debería estar en el lugar al que lo relegaron por su preferencia íntima y su círculo de amistades; se merece más por lo que fue y nos legó. También deberíamos ser más críticos con lo que consumimos y desechamos, a veces no somos conscientes de lo que perdemos. La cobardía, el odio y la intolerancia permitieron que esos tiernos muñecos de papier maché del Teatro Nacional de Guiñol junto con sus creadores desaparecieran bajo esa pira ardiente que fue la primavera negra. Quienes manejan los hilos de la cultura tienen el deber moral de reivindicar a los Camejo, Carril y a todos los demás artistas que enviaron a la oscuridad. Ay Carril, queremos darte las gracias en donde quiera que estés y que nos perdones porque ellos cumplieron su cometido de enviarte al olvido.


miércoles, 20 de octubre de 2021

11 curiosidades que debes saber del Teatro Guiñol Cubano (Fotos+Podcast)


El Guiñol es una rama del arte que ha tenido una fuerte presencia desde el mismo comienzo de la colonización española en la isla. El 14 de marzo de 1963 se materializó la idea de constituir una unidad artística por parte de tres personas que fueron Caridad Camejo, José Camejo y Pepe Carril; aunque ya desde 1949 ellos andaban con sus títeres al hombro, plantando sus ilusiones en varias escuelas de la capital cubana. Muchos aseguran que desde ahí ya se había conformado el Guiñol Cubano, como institución y grupo artístico profesional. Otros manifiestan que con ellos se comenzó a cocinar lo que sellaría por todo lo alto la época dorada del arte titiritero cubano. Es por ello que aquí te mostramos 11 curiosidades del Teatro Guiñol o Teatro de Títeres Cubano.

1. La escritora Dora Alonso fue la que creó la historia del Títere Nacional, llamado "Pelusín del Monte", en colaboración con los hermanos Camejo y Pepe Carril.
 
Dora Alonso y Pelusín del Monte

2. El creador del títere Pelusín del Monte después de la Cancelación de los fundadores del Guiñol fue Armando Morales. 
 
Armando Morales y Pelusín del Monte
 
3. La primera manejadora y voz del títere "Pelusín del Monte" fue Carucha Camejo.
 
4. Los antecedentes de la creación de "Pelusín del Monte" vienen del Siglo XIX, de mano del famoso "Pinoccio" de Carlo Collodi y el Francés "Guignol" de Mourguet.
 
5. El año en que nace realmente el Teatro Guiñol cubano fue 1956, cuando se unen Carucha y Pepe Camejo con Pepe Carril.
 
                                             De izquierda a derecha Pepe Carril, Carucha Camejo, Pepe Carril
 
6. La primera sede del Teatro Nacional del Guiñol fue el cine "Focsa", que desde el propio Triunfo de la Revolución Cubana funcionó como el cuartel general de esta manifestación artística. Aún existe, y continúa cumpliendo la misma función, aunque ya no es la única locación dedicada a las presentaciones de teatro de títeres, sigue siendo la más importante. 
 
 
   Cede del Guiñol Nacional en La Habana

7. Los principios fundacionales del Teatro Guiñol fueron: difundir lo mejor del arte universal, la cultura y las tradiciones nacionales, reunir a todos los titiriteros de Cuba para crear un gremio fuerte, intercambiar técnicas, maneras y estéticas, asumir el arte de títeres como una manifestación capaz de crear sentimientos profundos en quién presenciara sus obras sin discriminar entre  niños o personas adultas. 

8. Grandes escritores como Dora Alonso, Abelardo Estorino, Modesto Centeno, Reinaldo Arenas y Freddy Artiles colaboraron activamente en las adaptaciones teatrales en colaboración con  los hermanos Camejo y Pepe Carril.

9. Si se busca en EcuRed (una versión cubana de Wikipedia) sobre Carucha Camejo no sale nada importante después de 1967 exceptuando la mención sobre los premios que le otorgaron en 1994, 2001 y 2012. 
 
Carucha Camejo
 
10. Si se hace una búsqueda sobre Pepe Camejo sólo se encontrarán menciones sobre algunas de sus obras, premios y alguno testimonios de personas que lo conocían, como su hermana.
 
 
 Pepe Camejo/Archivo
 
 11. En el caso de Pepe Carril la investigación sobre él, su obra, y legado es más escasa que los Camejo.
 
La idea de Carucha y ambos Pepes de dar vida al teatro de títeres; y que no estuviera destinado a ningún grupo etario en específico, sino que permitiera la creación y adaptación de obras para todos, ha sido, sin temor a equivocarme, la guía para todas las generaciones de actores que los sucedieron. Sus ideas fueron el impulso y el despertar de un arte que, aunque tenía presencia desde hace muchísimos años antes, ellos fueron los que afianzaron esta tradición de manera profesional. Su etapa duró unos años durante los cuales el guiñol tuvo un nivel de factura muy alto y jamás ha vuelto a tener el nivel artístico de ese momento. Se asentaron como referencia cultural, y dieron paso a iniciativas artísticas que comenzaron a surgir por toda la isla como El Guiñol de Oriente.

martes, 19 de octubre de 2021

La Muerte del Arte Cubano, adiós al Guiñol. (Podcast + Fotos)


Y llegó la parte oscura de la luz de los Camejos a pesar de tener un recorrido impecable,  admirable y que  la Revolución Cubana los reconociera por lo que eran, cosechando todo lo que su talento les permitió dentro de las tablas cubanas. Su ejecución fue implacable, pensada por el más frío de los asesinos. La revolución de libertarios se vistió de Papa del medioevo y preparo su tribunal sagrado para dictar la peor de las sentencias, a esos que solo llevaban como brujería su arte y nada más.  A esos la frase de "La Historia me absolverá"  les sirvió para demostrar que esa línea jamás fue mejor expresada; como cuando a Carucha le fueron retirados sus hijos. Los títeres que ella creó y amó como a su carrera y vida misma. Los desecharon como basura, pero la mayoría tuvo su final en una hoguera ardiente típico de las piras que le daban fin a las brujas por manos del Holocausto Sagrado, y a los Pepes sus vidas tuvieron un final de película de terror donde ellos eran las presas a cazar.

Según palabras de Roberto Méndez y sito:

(…) por aquellos días, Carucha junto a su hermano Pepe Camejo y el otro Pepe, Carril y un grupo pequeñísimo de actores que eran también discípulos, habían logrado que el arte de los títeres desarrollado por ellos rebasara las fronteras nacionales y encontrara reconocimiento en varias naciones europeas, como ocurrió con el montaje de Don Juan Zorrilla. Cuando la UNESCO publicó, en francés, un gran volumen fotográfico, titulado Marionettes du Monde, junto a los antiquísimos muñecos del teatro balinés, a las marionetas sicilianas y a los títeres del Guignol parisino, estaban varias imágenes de las puestas concebidas por los Camejo (…)  

(…) Su carrera vino a caerse a mediados de 1971, cuando el Consejo Nacional de Cultura decidió, como parte del incalificable proceso llamado “Parametración, realizar un “operativo” para tomar la sede del Guiñol en el edificio Focsa, desaparecer sus libros y muñecos y poner en la calle a sus fundadores. La artista (…) vio clausurada así su trayectoria de apenas un par de décadas, pero jalonada de importantes reconocimientos internacionales. Se refugió en su casa. Padeció serios trastornos nerviosos (…)

(…) Aquel “operativo” significó, si no la desaparición del género en Cuba, una importante laguna en su desarrollo, de hecho, la isla quedó por mucho tiempo al margen del movimiento internacional de títeres y en el plano nacional parecieron instaurarse el conformismo y la rutina, como sucedió con otras manifestaciones. Sólo algunos discípulos como Ulises García y Armando Morales pudieron transmitir parte de aquella sabiduría en su quehacer de los años siguientes. Todavía hoy, lo mejor de la labor titiritera, por ejemplo el quehacer del Teatro de las Estaciones, de Matanzas, invoca con frecuencia, como parte de sus bases estéticas, sus nexos con el mítico Guiñol de los Camejo (…) 

El final de los Camejo y Pepe Carril fue de los más tristes, pero a la vez muy reveladores para algunos; ya que, esos otros vieron el verdadero rostro de las personas que los venían a salvarlos. Unos padres de familia vestidos con pijamas verde olivo plagados de ignorancia, furia y desprecio por aquellos hijos rebeldes que no quieren obedecer a sus padres.  El castigo a sus hijos fue ejemplarizante y doloroso. Tanto que Carucha salió de Cuba a través de Venezuela en 1984 y de allí, terminó en la Ciudad de ciudades... Nueva York. Donde ejerció labor de profesora de español aunque nunca abandonó su pasión por los títeres. Tuvo la oportunidad de visitar Cuba en dos ocasiones por temas familiares. Pero la venció el cáncer en el año 2012.

 En el caso de Pepe Camejo fue aún más doloroso, ya que, murió en los Estados Unidos en la ciudad que su hermana también terminó en el año 1988, después de salir de Cuba y estar preso acusado por ser cómplice del que fuera el escritor maldito de las letras cubanas Reinaldo Arenas.  De Pepe Carril bastante poco se sabe y aún estoy en búsqueda de muchos datos que se perdieron a propósito, por descuido o desinterés.

El año 1971 en Cuba para muchos fue, es y será recordado  como la etapa que el sistema le declaró  la guerra a la cultura. El "Quinquenio Gris", como lo llamaron no solo ocupó cinco años en el espacio temporal cultural y social cubano. En la Actualidad podemos ver casos en los siguen valiéndose de esas prácticas que ya no lleva el nombre de "parametración" para desechar a artistas y censurar al arte que nació como protesta contestataria que no conoce de ideologías, ni de política.

 Nunca se  debió pasar por situaciones o momentos como estos. Al final esos caminos por los que transitó no llevó a ningún lado y ni tampoco la cultura ganó o ganará.  Simple, su desencadenamiento se tradujo en la desaparición del Teatro de Títeres cubano de un día a otro y de ahí solo nació el olvido y el desencanto. 

Recuerdo cuando de pequeña mi mamá me hablaba de una obra que ella recordaba con cariño, hoy ella tiene 54 años y la vivió a plenitud. Esa pasión que despertó sus palabras que para mí no tenía ningún sentido fue el detonante para que al crecer quisiera que lo conociera. Pelusín del Monte es el títere cubano que nos recuerda la abundancia de la campiña cubana y la bravura de los guajiros de esta tierra que la baña el  Mar Caribe.

   Todos lo recuerdan con amor, y que decir de los Camejo. Mi madre me decía siempre: ¿Cómo condenar aquellos que llevan y destilan a Cuba en todo momento? El tiempo nos ha respondido esa pregunta de muchas maneras pero la de estos tres fue de las peores repuestas que alguien pudo recibir. 

Según Rubén Darío Salazar y Norge Espinoza Mendosa en su libro “Mito, verdad y retablo: El Guiñol de los hermanos Camejo y Pepe Carril” expresaron y sito:

(…) Aquí hubo personas contra los muñecos y contra los Camejo. Los arrinconaron para quemarlos o que se pudrieran, ¿ dónde están los muñecos?... era más fácil quemar muñecos que a ellos (…)

sábado, 16 de octubre de 2021

Anuncio de una muerte premeditada (+Podcast)


                                                        Los hermanos Camejo y Pepe Carril/Archivo

Los hermanos Camejo iniciaron estudios en la Academia de Arte Dramático (ADAD) en 1947 y de ahí se graduaron en 1949. En ese mismo año comenzaron a practicar la actuación mediante su retablo ambulante, con el cual ofrecían funciones en las escuelas públicas de la capital. En 1950 fueron contratados para una “misión cultural”. Esta misión consistió en promover la cultura cubana y sus tradiciones por medio de las marionetas. Por lo tanto, a partir de ese momento serían nada más y nada menos que un instrumento pedagógico por excelencia, sujeto solo a la imaginación de estas dos personas extraordinarias.

Todo comenzó a situarse en su lugar cuando en 1963 Carucha y Pepe Camejo junto con Pepe Carril deciden fundar el Teatro Nacional Guiñol Cubano bajo el auspicio del Consejo Nacional de Cultura. Luego se incorporaron Carlos Pérez Peña, Ulises García y Alonso Lastre. Poco tiempo después se unirían Xiomara Palacios, Armando Morales, Ernesto Briel, Antonia Eiriz, Gildo Ginar y Antonio Vidal. Estos tres últimos no se dedicaban al teatro en sí, sino que eran pintores y representaban a la vanguardia de las artes plásticas del momento; colaboraban con Carucha sobre todo, y también con Los Pepe de manera activa. Ninguno de estos actores y colaboradores sobrepasaban los 21 años, por lo que tenían una responsabilidad bastante grande dentro del arte, aún más cuando habían fundado una institución y una unidad artística dentro de la recientemente nacida Revolución Cubana.

Aunque en sus principios muchos del alto mando del gobierno cubano no comprendían la función de esta expresión del arte, la dejaron ser en ese momento. Carucha y Pepe Camejo junto a Pepe Carril se dedicaron a investigar y montar obras basadas principamente en la cultura cubana y sus vericuetos. Esta etapa dio lugar a un período cultural muy interesante que arrojó luz a historias olvidadas, pertenecientes a la Cuba profunda y su imaginario. Tal es el caso de Chicherikú, Shangó de Ima; y clásicos como La Celestina, El Mago de Oz y La Cucarachita Martina. Los guiones de los dos últimos títulos los adaptó Aberlardo Estorino para las puestas en escenas de Carucha y Pepe.

Luego de un tiempo, los tres comenzaron a hacer sus trabajos en solitario, sin dejar de colaborar como grupo. Según la propia Carucha, en entrevista dada a David Arocha: Pepe era un clásico y en sus obras se notaba la hermosura que representaba con actos bien conformados, montajes altisonantes, atractivos y dirigidos al público infantil. Ella, por su parte, representaba a la aventura y la osadía, algo así como los mambises en la manigua cubana. Podías encontrarla en la madrugada ensayando para estrenar un espectáculo al día siguiente. El teatro de Carrril era más visceral, estaba construido desde las emociones, dedicado a públicos de todas las edades en su mayoría.

La Fundación del Teatro Nacional de Títeres no fue una labor fácil porque aunque tuvieron muchas ideas geniales, también muchos oponentes influyeron en su creación, desarrollo y finalmente la desaparición de esta expresión artística. Hasta el día de hoy la obra de Carucha, Los Pepe, Ulises, Carlos, Xiomara, Armando, Ernesto, Antonia, Antonio y Gildo siguen siendo eternas y sobrepasan la barrera del tiempo; dejándonos monumentos intangibles en sus adaptaciones y obras originales realizadas para el teatro de títere como:

  •  La Corte del Faraón
  •  Yo o Vladimir Maiakovky
  • El Reino de este Mundo
  • Venus y Adonis
  • Juan Tenorio
  • La Blancanieves
  • Cecilia Valdés
  • La Cenicienta
  • El Patito Feo
  • Don Juan  Zorrilla
  • Pedro y El lobo


miércoles, 13 de octubre de 2021

Siglo XX y el Teatro de Títeres Cubano (+Podcast)

 

Foto: Cuba en la Memoria

<<¡Hola! ¡Hola! Chiquillos y chiquillas, piccollinos y piccollinas sean bienvenidos a su canal donde como dice el título de este episodio y ya lo habíamos adelantado antes, que hablaríamos del Siglo XX en el teatro de los muñecos y representaciones animadas en la mayor de las antillas.   

... Y sin más comentarios dentro audio... (Sonido de upgrade de Super Mario Bros)

En muchas bibliografías podrán encontrar reseñas que dicen que esta rama de la  cultura es muy joven dentro de Cuba, pero la verdad es que no y los  anteriores episodios nos sirven como evidencia de ello. Ahora bien, que obtuvo mayor reconocimiento y se volvió un arte profesional en el siglo veinte es una verdad reveladora e irrefutable y en eso no existe contradicción alguna. Lo que tenemos que tener claro es que el sabor amargo se nos hará más pronunciado a medida que avancemos en esta cena artística.      

En este siglo pasó de ser una práctica de bufa y divertimento relacionaado a los infantes, fiestas y ferias locales a formar parte del catátogo profesional cultural cubano. Con la visita en la década de los 30 del teatro itaiano “Teatro dei Piccolli” directoriada por el actor Vittorio Podreca, que dejó muy buena impresión entre los artistas y las personas que se dedicaban hacer teatro.

Esa visita resultó ser el despertar que se necesitaba para el gremio de la máscara triste y la alegre, muchos grupos de teatro en la década de los 40 comenzaron a incorporar a los títeres y muñecones dentro de sus repertorios. También este momento marcó una temporada importante dentro de las tablas cubanas y nos posicionó en el mundo como uno de los países con una de las mejores puestas en escena, que alternaban entre el títere y los actores de manera magistral; adémas se dejó claro que éramos un país abierto a las corriente modernas dentro del arte.

En el ocaso de esta década nació un mitológico personaje llamado Pelusín del Monte,  aunque en este momento no abundaremos en su historia dió lugar al advenimiento de los hermanos Camejos. Caridad y José Camejo, mejor conocidos como Carucha y Pepe. Hablé de Pelusín porque Caridad o Carucha fue la primera manejadora de esta marioneta  quién lo lanzó a la fama. 

Los Camejos son en sí los padres del títere profesional en Cuba, pero he de decir que también su luz y oscuridad. Esa oscuridad no viene de nada inusual, sino que sufrieron de muchos escollos que opacaron su carrera artística. Pero esto no detuvo su crecimiento y solidificación en años posteriores y en el año 1959 con el Triunfo de la Revolución de Fidel Castro desarrollaron más el Guiñol, por estas razones no se debe perder la segunda parte para que conozca todo con respecto a este tema.

Hasta aquí esta primera parte sobre el siglo xx en el teatro de títeres o guiñol cubano, pero no se desanime vuelva en el proximo episodio donde hablaremos de la la fundación de esta rama y cuando adoptó el nombre de guiñol, tambien como trato la naciente revolucion a esta rama del arte y la cultura cubana.

Y como siempre digo:  no deje de vuelver que eto esta cada vez más interesante y no se olvide de suscribirse, dar me gusta y compartir.  Pero antes de despedirnos debemos aclarar una duda recurrente que tiene que ver con la suscripción, cuando usted busca la página sale el Nombre de Alegna Muro Manguela ahí pica el botón y visiblemente verá el "Follow  o suscribirse"  y ya listo. Ahora si les deseo que disfruten de cada episodio, le habló la negra cimarrona cubana desde confluencia cubana. 

Descrpción del episodio:

Música: Epilogue (Silence)

Duración: 00:04:42

Narración: Alegna Muro Manguela

Tamaño: 4.2MB

lunes, 11 de octubre de 2021

Te invito a conocer el mundo mágico del guiñol cubano (+Podcast)

 

Temporada # 2: Teatro de Títeres o Guiñol en Cuba


                                                                                                     Foto: Stock

<<¡Hola! ¡Hola! Bienvenidos sean a este episodio que tiene una doble intencionalidad: la primera, que estrenamos una nueva temporada y la segunda, que con este comienza un nuevo tema. ¡Ehhhh! todos ganamos porque siempre con las cosas nuevas vienen retos buenos. 

Seguro que ya quieren saber de qué se trata... pues ni más, ni menos que del Teatro de Títeres o Guiñol, pues sí. 

... Y sin más comentarios dentro audiooo... (sonido de upgrade de juego de Mario)

Este arte desafortunadamente en la actualidad no goza de la misma relevancia que otras ramas del arte, y eso no significa que siempre haya sido así.  Y aunque no puedo negar que se puede apreciar desde muchas manera, como por ejemplo al alcance de un click; como todo en la sociedad moderna, por medio de plataformas que distribuyen contenido audio visual y en donde podemos encontrar mucho material de valor de esta profesión. vale decir que no se vive con la misma intensidad que asistir a una sala de teatro, donde el actor transmite un mensaje mágico al espectador, que no tiene precio, ni comparación alguna con otros medios.

Dicho esto, espero sinceramente que esta grabación sobre el tema a tratar en cuestión les sea útil para que indaguen e investiguen sobre esta apasionante y fascinante práctica artística. que los puede personalizar en un muñeco. y si eso sucede, no se alarmen, es parte de la dinámica o magia que ese arte puede evocar. Mis queridos cubalomános, el teatro de títeres en nuestro país tiene una larga historia dentro de la cultura que nos representa. Aunque si conocen la trama de la novela de Dante "La Divina Comedia", saben que el autor dividió el infierno en varios círculos, en correspondencia con el pecado cometido. Pues si hacemos una analogía de esto con el guiñol podríamos asegurar que está entre los últimos en popularidad y aceptación dentro de la cultura.

Teniendo todo lo anterior en cuenta, comencemos a contextualizar cómo llegó a la isla este noble arte. Las primeras evidencias que se tienen del uso del vocablo títeres en Cuba fue por medio de las bitácoras o diarios de viajes de los conquistadores españoles hace más de 500 años. En esos barcos viajaban chirimías, sacabuches y dulzainas, un volteador y otro que jugaba con las manos y hacia títeres. 

Con el paso de los años la palabra o vocablo adquirió otra connotación, ya que se bautizó a un ave con el nombre de Títere Sabanero. Y en el primer capítulo dedicado a las curiosidades del teatro de títeres develaremos más detalles. Igualmente. seguiremos avanzando en este tema, y sé que me acompañarán.

Es por ello que les pido que vuelvan en el próximo episodio; por ahora, si les gustó este episodio, den "me gusta", compartan, suscríbanse, comenten y añádannos para que Spreaker les avise cuando haya un capítulo nuevo en el canal. Les habló la Negra cimarrona cubana desde Confluencia Cubana.>>

Descripción del episodio:

Música: Wave -Filmora X

Duración: 00:3:05

Publicado: 06 de octubre de 2021

Narració: Alegna Muro Manguela

5 curiosidades sobre el Guiñol cubano (+Podcast)


<< ¡Oiga; sí, usted mismo, Cubalómano! ¡Llegó la Negra cimarrona cubana con datos curiosos para usted!... Y sin más comentarios, dentro audio...

  1. La primera vez que se tiene evidencia sobre el vocablo títeres en Cuba es en las bitácoras o diarios de viaje de los conquistadores españoles a su llegada a las Indias Occidentales.
  2. El uso que se le dio a la palabra títere en Cuba en primera instancia no fue para nombrar ese arte, sino para nombrar un ave que luego se le cambió el nombre a "Frailecillo".
  3. Al Frailecillo se le nombró "títere sabanero" por su trino estridente que se asemejaba al sonido que adoptaba la voz de los actores detrás de los muñecos, pues éstos se colocaban una lámina metálica en la boca para hacer la voz más aguda.
  4. La primera vez que se habla en un medio social en Cuba sobre el teatro de títeres fue en el año 1794 en un periódico de la capital de la Isla en donde nos dan su impresión sobre la aceptación social y la calidad que tuvo la obra.
  5. En 1798 encontramos referencias al término en la carta "Viajes a la isla de Cuba", donde Buena Ventura Pascual hace comentarios sobre los espectáculos más comunes en Cuba de ese siglo: jolgorios, bailes, juegos, comedias, máscaras... y menciona que no dejan de concurrir también por temporadas, boletines titiriteros.
Como siempre digo, me gusta tener contacto con mis cubalómanos y la retroalimentación es lo mejor cuando se hace un show de entretenimiento. Así que, por favor, compartan, comenten, den "me gusta" y añádanos a sus favoritos para que sean notificados cuando hayan nuevos episodios.
 
Tampoco olvide que éste es un blog en donde se encuentra la transcripción de cada capítulo. El enlace del blog está en la descripción de este capítulo. Lo esperamos por ahí... Chau... >>

Descripción del episodio: Música: In Hope Full Music by HookSounds
Duración: 00:2:34
Narración: Alegna Muro Manguela (Negra Cimarrona Cubana)

Cuba la isla madre de 11 millones de cubanos (+ Podcast)



 Foto: Plaza Vieja-Bar Bohemio
                                                                                               

Este blog, al igual que el podcast que lo acompaña, son suigéneris, pero no podría ser de otra manera; quienes me conocen, saben cuán diversa y singular puedo ser. Con esto en mente, quisiera que se adentraran en este, mi mundo, donde Cuba, mi Patria, mi suelo, mi vida y mi familia lo son todo.

Quién conozca a un cubano sabe que por las venas nos corre el agua salada del Mar Caribe, nuestras uñas están moldeadas con la arena blanca de nuestras playas, tenemos la lengua picante como el sol que cada día se asoma en nuestro suelo... pero si hay algo que tenemos es un corazón inmenso que alberga al mundo entero. Donde llegamos somos el alma de la fiesta, Somos un ajíaco perfecto; sí, una mezcla entre español, africano, taíno, chino, japonés, estadounidense, puertorriqueño y cuanto nacional extranjero migrara hace mucho tiempo atrás, desde Cristóbal Colón hasta 1959. Incluso luego de esa fecha la mezcla no se ha detenido, y en otras tierras la herencia cubana sigue en pie, porque, somos una máquina de unir naciones; si de nosotros dependiera, esos reyes del medioevo o de la edad media podrían habernos llamado y la paz quedaba establecida en un segundo. Por lo que, no dudo que algún sangre azul tenga herencia cubana.

Cuba, cubanos e isla son los ingredientes necesarios para un buen sopón en medio del verano o formar una tríada mitológica como la egipcia de Ra, Ptah y Amón, pero llevada al Panteón Yoruba.  Cuando hablo de mí país no hay manera de que no se me erice la piel, es un sentimiento que les puedo asegurar con los ojos cerrados y la mano en el pecho que cada cubiche lo ha experimentado. Aún no logro superar cuando veo a un co-nacional presentandóse a Got Talent España o en la MLB, donde no puede faltar mi vitoreo detrás de la pantalla "(...) coño... ese es de los míos (...)" Imposible separarse de esa sensación tan única, inigualable e indescriptible.

No somos perfectos y ... ¿saben qué? somos cubanos, somos azúcar, somos sal, somos un pueblo sufrido, somos incomprendidos, somos orgullosos, somos inventivos, somos creativos, somos una población poco común, semejantes a la Atlántida y a su vez muy diferente; claro que aún no nos hemos convertido en la víctima de nuestro propio mar, ese que nos forjado la piel y el cuore, el mismo que nos ha permitido trazar nuevos pactos con la vida, negocio que sabíamos que el costo sería perderla.

Bienvenidos a mi mundo, a mi Cuba y a mi familia, no se van arrepentir, somos buenos anfitriones, perfectos chambelanes o partners. Welcome again, play this game with me... adelanto que tiene tonos y matices muy diferentes a muchos shows. Somos el resultado del  sabor de un puro Habano, del café y el ron; aunque debo confesar que somos mucho más que eso, somos cubanos, gente común con una vida extraordinaria. Víctimas en muchas ocasiones de nuestro propio éxito.

Featured post

Fresa y Chocolate: Análisis crítico de la película cubana y su impacto cultural y político

  Contexto Histórico y Social: "Fresa y Chocolate" , dirigida por Tomás Gutiérrez Alea y Juan Carlos Tabío, se ambienta en La Hab...